Manos pequeñas, manos de amor,
Pongan de nuevo sus palmas sobre este corazón,
Sientan el latido de esta ilusión
Y devuelvan a mi pecho todo el calor.
Manos pequeñas, llenas de pasión
De fuego intenso, de sincera devoción
De belleza blanca, de inocencia interior,
Del universo son perfecta creación.
Manos pequeñas, abrácenme otra vez,
Llénenme de gloria, esperanza y calidez
Manos pequeñas, abrácenme otra vez,
Que dentro de su abrazo, en el cielo estaré.
Manos pequeñas, honestas y sinceras,
Si entrecruzar sus dedos de nuevo pudiera,
No las soltaría por nada en este mundo,
A menos que para besarlas fuera.
Manos pequeñas, de ángel ustedes son,
Ayuden a ese ángel a buscar en su corazón,
Y si en el camino aparece el perdón,
Convertiré este poema en canción.
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